Guillermo del Toro ha llevado a la pantalla su visión personal de «Frankenstein», la novela gótica clásica de Mary Shelley escrita en 1818. La película se estrenó en Netflix el 7 de noviembre de 2025, convirtiéndose en uno de los estrenos más esperados del año y demostrando que la creatividad cinematográfica sigue siendo territorio donde la IA no tiene cabida.
Un proyecto ambicionado durante tres décadas
Según Infobea, Guillermo del Toro ha expresado que este proyecto ha sido una ambición suya desde hace más de treinta años. El director mexicano, ganador del Óscar por «La forma del agua», ha querido durante décadas abordar este clásico literario con su visión única y personal.
La fascinación de Del Toro por esta historia se remonta a su infancia, como reveló en el New York Times: «Cuando era niño, disfrutaba viendo a Boris Karloff encarnar a la criatura en la película de 1931». Esa influencia del cine clásico ha marcado profundamente su aproximación al material.
Un elenco de categoría mundial
La película reúne a actores de primer nivel:
- Oscar Isaac como Víctor Frankenstein, el científico brillante pero egocéntrico
- Jacob Elordi como la Criatura, un papel que se convierte en el corazón emocional del film
- Mia Goth en rol dual: Elizabeth Lavenza y la Baronesa Claire Frankenstein
- Christoph Waltz como Heinrich Harlander
- Charles Dance como Leopold Frankenstein, el padre del científico
- Felix Kammerer como William Frankenstein
Un cambio de último momento en el reparto
Según El País, la historia del casting tiene un giro interesante: «Jacob Elordi no era la primera opción de Guillermo del Toro para encarnar a la criatura». Andrew Garfield abandonó el proyecto semanas antes de comenzar la producción, tras meses de preparativos.
Cuando Elordi entró en el proyecto como recambio, Del Toro y el maquillador Mike Hill reinventaron completamente al monstruo. El resultado ha sido aclamado: «El trabajo de Elordi, la tristeza y soledad que transmite, es el corazón de una película que crece en su segundo acto, cuando la criatura, al fin, toma la palabra».
Duración y producción: un proyecto monumental
Según Gestión, «Frankenstein» tiene una duración de 149 minutos, es decir, 2 horas y 29 minutos. La película se grabó principalmente en Edimburgo, Escocia, ofreciendo un telón de fondo perfecto para esta historia gótica ambientada en la Europa del Este del siglo XIX.
El presupuesto y los recursos dedicados a esta producción reflejan la ambición de Netflix y de Del Toro: estamos ante un despliegue visual sin precedentes en categorías como diseño de producción, vestuario, maquillaje y peluquería.
La visión romántica y gótica de Del Toro
A diferencia de otras adaptaciones de «Frankenstein», la versión de Del Toro se centra en la tragedia familiar y el perdón. Como explicó el New York Times en su análisis: «El director mexicano nació para hacer esta interpretación cinematográfica de la novela clásica de Mary Shelley».
El destino del científico y su criatura se ancla en la infancia solitaria de Víctor Frankenstein, marcada por la muerte de su madre y un padre distante y autoritario. «Todo el dolor de la película nace de esa falla familiar y de la visión compasiva de Del Toro: el perdón es clave en su visión del mito».
Esta es una diferencia crucial respecto a interpretaciones previas: Del Toro ama al monstruo, y eso se siente en cada fotograma.
Influencias literarias y cinematográficas
La adaptación de Del Toro está profundamente empapada de literatura. Como señaló el New York Times, la novela original de Mary Shelley incluía un epígrafe revelador de «El Paraíso perdido» de John Milton: «¿Te pedí, Dios omnipotente, que me convirtieras en hombre? ¿Te pedí que me sacaras de las tinieblas…?»
Shelley se inspiró en Milton mientras escribía su obra en 1818, y Del Toro recupera esa influencia literaria clásica para darle profundidad filosófica a su versión cinematográfica. «Cuando Mary Shelley comenzó a escribir su obra, su esposo, el poeta Percy Bysshe Shelley, leía en voz alta pasajes de la epopeya de John Milton».
La recepción crítica: luces y sombras
Las críticas han sido variadas, pero mayormente positivas. Según Rotten Tomatoes, la película es descrita como: «Un épico lujoso que obtiene sus volts más vigorizantes del extraordinario desempeño de Jacob Elordi». La plataforma añade: «Con su legendario toque visual, Guillermo Del Toro resucita Frankenstein como un Prometeo moderno que es gloriosamente gótico y desgarrador».
En IMDb, la película tiene una calificación de 7.6/10, con críticos destacando: «Finalmente, después de un montón de adaptaciones mediocres y terribles que abordaban la epopeya de ciencia ficción gótica de Mary Shelley, Guillermo del Toro consigue tener su visión completamente realizada».
Sin embargo, como señaló AS, no todo es alabanza. La crítica menciona que el guion es «demasiado explícito» y que hay un diálogo innecesario donde se verbaliza que Víctor es el verdadero monstruo, como si 200 años después de la novela original, alguien aún no lo hubiese entendido.
El debate sobre la visualización en pantalla grande vs streaming
Un tema candente alrededor de este estreno es dónde ver la película. Según El País, «Es una vergüenza la estrategia de Netflix, que parece decidida a ahogar el paso por los cines de sus estrenos».
La crítica resulta severa: «En el caso de una película como esta, especialmente tratándose de una fantasía gótica de grandes decorados y dos horas y media de duración, el ámbito doméstico acaba siendo letal». Sin embargo, Netflix permitió un limitado estreno en cines antes del lanzamiento en streaming, intentando al menos reconocer la ambición visual del proyecto.
Diseño de producción de nivel Oscar
Lo que todos los críticos acuerdan es que el diseño visual es excepcional. «Estamos ante uno de los despliegues más impactantes del año en diseño de producción, vestuario, maquillaje y peluquería. Oscar cantado y merecido en alguna de ellas», afirma AS.
Los detalles visuales abundan: el doble papel de Mia Goth a lo Clark Kent, su vestuario en consonancia con la criatura, la recreación de las viñetas de Bernie Wrightson, o el guiño a «La novia de Frankenstein». «Hay cariño y atención hacia ese mundo, cuya ilustración quizá no sea novedosa, pero sí cautivadora».
La paradoja de Del Toro y la IA
Hay una ironía interesante en esta película: Guillermo del Toro es un enemigo declarado de la IA en el cine, pero como señala AS, «la iluminación y ciertos elementos visuales de su obra parecen tan artificiales».
Sin embargo, lo que sí está completamente libre de IA es la dirección de actores, el guion y la visión creativa. En tiempos donde se habla constantemente de IA generativa, Del Toro apuesta por la creatividad 100 % humana.
Comparación con otras adaptaciones de Del Toro
Según Infobea, «Mucho menos inspirada y original que la versión de ‘Pinocho’ del director, la cinta brilla por su diseño de producción y palidece por su guion». La comparación es inevitable: Del Toro dirigió «Pinocho» en 2022, otro proyecto de fantasía gótica que también fue muy elogiado visualmente.
Ambas películas muestran «la admiración y respeto de Del Toro hacia el material fuente mientras también vemos su huella personal y alma derramada en todo el proyecto».
¿Vale la pena ver Frankenstein?
La respuesta depende de lo que busques. Si buscas un espectáculo visual cautivador, actuaciones emotivas de alto nivel (especialmente la de Jacob Elordi), y una aproximación nueva a un clásico literario respetando su esencia, entonces Frankenstein es imprescindible.
Si buscas un guion revolucionario o una narrativa que desafíe completamente el material fuente, entonces quizá encuentres que la película se queda corta. Como concluyó AS: «Es tan vistosa y entretenida como explícita y vacía. Una criatura imperfecta que, como su protagonista, despierta varios interrogantes sobre si de verdad tiene alma».
Disponibilidad
Frankenstein está disponible exclusivamente en Netflix desde el 7 de noviembre de 2025. Con una duración de 2 horas y 29 minutos, es perfecta para una noche de cine en casa, aunque muchos critican que una película de esta envergadura merece la pantalla grande.
Frankenstein es la película que Guillermo del Toro ha estado esperando hacer durante treinta años. Su amor por la historia de Mary Shelley, su fascinación por el cine gótico de la década de 1930 y su peculiar sensibilidad cinematográfica convergen en una obra ambiciosa que, a pesar de sus limitaciones narrativas, ofrece una experiencia visual arrebatadora.
Jacob Elordi brilla en un papel que podría redefinir su carrera. Oscar Isaac entrega una interpretación profunda del tormentado Víctor. Y Guillermo del Toro demuestra, una vez más, que la creatividad cinematográfica sigue siendo territorio exclusivamente humano.
Si eres fan de cine gótico, de adaptaciones literarias ambiciosas o simplemente quieres ver qué hace un director ganador del Óscar cuando se le da presupuesto y libertad creativa, «Frankenstein» es obligatoria.
